Si bien los resultados de los trabajos que realizaron los alumnos
son muy buenos y que poco tienen de envidiar de cualquier zapato que
vemos en vidrieras, tengan en cuenta que lo que se enseña en el curso
intensivo de 8 clases es un oficio. Esto quiere decir que lo que se enseña es una técnica,
en este caso la transformación de un material que luego se convierte en
un zapato. Lo que se ve es la técnica con la que yo trabajo, hay miles
de técnicas que van a variar según el calzado a realizar y también según
la persona que los arme. Lo maravilloso de aprender un oficio es que es
una técnica que no acaba en dos pasos, sino que a medida que uno va
encontrandose con los materiales y las herramientas la técnica se va
complejizando, no solamente nosotros transformamos el material sino que
uno se ve transformado durante el proceso. Un oficio requiere de mucha práctica y paciencia,
las dos horas de clase no son suficiente, y mientras más uno pueda
practicar fuera de esas horas de clase mejor. Aunque no sea trabajando
especificamente sobre un zapato, un buen ejercicio es mirar los zapatos
que tenemos en nuestro armario, mirarlos por dentro, tratar de ver los
materiales con que se confeccionaron, etc, otro buen detalle a observar
es ver qué tipo de calzado usan las personas, cómo caminan, se paran,
etc. El tipo de calzado que realizamos en las clases es un calzado
artesanal y urbano. Los procesos que utilizamos tienen poca intervención
mecánica. Lo que el alumno aprenda en las clases no depende solamente
del maestro, sino también requiere de la disposición que tiene cada
alumno.
Para más info de las clases: atilinzapatos@gmail.com
Las clases arrancan a partir de agosto en Espacio Juky, Belgrano. Tienen un cupo máximo de 8 personas.
Horario:
Lunes de 18 a 20hs
Martes de 18 a 20hs (cupo completo)
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